Casa Rosada celebra y el mercado llora tras espaldarazo del FMI a Fernández
Los bonos cayeron 1,4% en promedio y el riesgo país llegó a los 2.143 puntos, luego de que el Fondo declarara la deuda del país como “insostenible”. Eso sí, los expertos miran con optimismo el futuro de la economía trasandina.
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La decisión del Fondo Monetario Internacional (FMI), de declarar la deuda argentina como "insostenible" dio un respiro a la Casa Rosada el miércoles. El gobierno cantó victoria e incluso el presidente Alberto Fernández dijo: "El Fondo nos dio la razón, era verdad lo que decíamos", durante la inauguración de una planta de medicamentos.
En contraste con el optimismo del mandatario, los bonos cayeron y el riesgo país subió, aunque quienes sí se alinearon con el sentir del gobierno fueron los empresarios y los sindicatos. Ambos sectores se reunieron ayer con el ministro de Economía, Martín Guzmán; y el jefe de gabinete de Fernández, Santiago Cafiero, entre otras autoridades.
El presidente de la Unión Industrial Argentina (UIA), Miguel Acevedo, dijo que "lo que ha dicho el Fondo es lo que también está diciendo el gobierno, y me parece que es el puntapié inicial para empezar las negociaciones o para llegar a alguna solución con el tema de la deuda".
En línea con esto, el reconocido economista estadounidense y director del Centro para el Desarrollo Sostenible de la Universidad de Columbia, Jeffrey Sachs, dijo a DF en respuestas por escrito, que la decisión del organismo multilateral "se basa en un análisis sólido de la carga de la deuda de Argentina, el contexto social y político, y la necesidad de un marco macroeconómico realista para resolver la crisis financiera de manera definitiva y no superficial y temporal".
Reacción de mercados
No todos los actores se tomaron tan bien la decisión del Fondo. Ayer, los bonos argentinos cayeron 1,4% en promedio. Esto podría adjudicarse al acotado plazo que tiene el país para llegar a acuerdo con los acreedores, según dijo la propia directora gerente del FMI, Kristalina Georgieva, en Arabia Saudita, donde se desarrollará el G20 este fin de semana.
Por su parte, la directora de investigación política para América Latina de Verisk Maplecroft en Buenos Aires, Jimena Blanco, dijo a Bloomberg que "los temores de los bonistas privados se han hecho realidad (...) El Fondo terminó perjudicándolos para salvar su posición. El recorte tiene que venir del sector privado".
El riesgo país, en tanto, tuvo una variación de 1,93%, alcanzando los 2.143 puntos.
Fragilidad financiera
Para Sachs, Argentina sufre de una fragilidad financiera que incluye altos niveles de endeudamiento, déficit presupuestarios significativos, contracción económica y baja confianza pública en la moneda. Es por esto que "el nuevo gobierno y el FMI tienen la intención de establecer bases sólidas para superar esta fragilidad, con el fin de lograr una nueva era de estabilidad macroeconómica y desarrollo sostenible a largo plazo", planteó.
El economista dijo que una parte de la solución a futuro será una reducción significativa de la carga de la deuda. Para ello, explicó, existen muchas maneras y probablemente esas maneras sean uno de los objetivos de las negociaciones entre Argentina y los bonistas.
"La declaración del FMI deja en claro que respalda el llamado del país a una reducción significativa de la carga de la deuda a largo plazo, para permitir la recuperación de la estabilidad financiera. Esto en el contexto de satisfacer las necesidades económicas y sociales de Argentina en su búsqueda del desarrollo sostenible a largo plazo".
El expresidente del banco central argentino, Luis Caputo, celebró la decisión. En esa línea, criticó la acción de la extimonel del FMI, Christine Lagarde, quien a su juicio "hizo estéril todo esfuerzo monetario y fiscal por controlar la inflación (durante la administración de Mauricio Macri). Agravó la recesión y terminó por restringir aún más el crédito", consignó El Cronista.
En un reporte, economistas de Capital Economics se mostraron escépticos de que la resolución del FMI "allane el camino para un inminente acuerdo de reestructuración" por tres motivos: puede que los bonistas muestren recelo luego de que los inversionistas ofrecieran un pago exitoso de la deuda de Buenos Aires; creen que el sentido de urgencia llegará recién el próximo año; y porque puede que los inversionistas estén esperando aclaraciones sobre la futura relación de Argentina con el Fondo.
JP Morgan en tanto, advirtió que aún falta información sobre el nuevo plan que está negociando el gobierno con la institución: "Esto sugiere que las autoridades aún no tienen un programa económico definido".